Si tuviese el valor para escribir todo lo que realmente he querido decirte por mucho tiempo, no sé si sería mi acto más grande de valentía o el más estúpido en la pérdida de mi dignidad.
Aunque hace mucho que ya no estés, de la nada afloran los sentimientos, toda muestra de caballerosidad y amor me lleva a compararlo contigo, es que de lejos has sido mi más bonita aventura, dejaste marcada tu esencia en mi ser, eres ese bonito recuerdo al que acudo cada que deseo sentir la dulce sensación de libertad,
Cómo no extrañar esas charlas que confrontan, otras insípidas de tonta risa, aún recuerdo el caminar de tu lado sin que importara nada alrededor, las risas profundas del cantar de una canción una y otra vez, esa sensación intimidadora de tu mirada y ese abrazo fuerte que reconfortaba.
Tú y tus ocurrencias inesperadas, esa inteligencia, sensatez y carisma me cautivaron sin darme cuenta.
No sé si fue amor, pero algo se le parece, me enseñaste que mi virtud más grande y bonita la tengo en mi cerebro, que mi fantasía vuela para soñar, escribir, cantar y bailar.
Ha pasado mucho tiempo y pasará mucho más, hoy con el corazón palpitante he pensado en ti, quería recordarte y saber si eres feliz, si de vez en cuando me recuerdas, si por el contrario me has dejado en el olvido, ese lugar en el que estoy absolutamente nunca estarás, mi debilidad el vino que incita la memoria hoy sin necesidad de él pasas por aquí e inspiras, motivas y alientas a escribir.
Para ti, con todo el cariño que mis manos te alcanzan a brindar.
Y.G.R
Y.G.R
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